Buenos Aires es la sede del No Spaghetti Edition Festival 2005, un encuentro de improvisadores argentinos y noruegos.
Cada vez son más los porteños que se vuelcan a las expresiones artísticas de vanguardia. Esta noche, a partir de las 20, comienza el No Spaghetti Edition Festival 2005. Se trata de un festival internacional (itinerante) de música improvisada, que este año se realiza en Surdespierto, Thames 1344. Serán tres noches a pura improvisación.
Años atrás, una propuesta de estas características hubiera sonado irrisoria. Probablemente hubiera sido parte de un circuito, de alguna manera, marginal. Hoy, gracias al trabajo de un grupo de músicos argentinos de vanguardia, y a la realización de varias experiencias similares, un festival de estas características se vuelve cool. Los exhibidores de postales gratis muestran atractivas postales del evento, que se realiza en un coqueto espacio del barrio porteño de Palermo.
El No Spaghetti Edition es, en realidad, un ensamble de música improvisada de gran escala radicado en Noruega. ¿Y cuál es el link entre Noruega y la Argentina? Muy sencillo. El año pasado, el guitarrista y tañedor de banjo Ivar Grydeland, realizó una gira por el interior de la Argentina junto al percusionista argentino Diego Chamy y el trompetista, también argentino, Leonel Kaplan. Fue tan bueno lo que ocurrió en cada uno de los ¡once! conciertos, que Ivar decidió que la próxima edición del festival itinerante de su grupo, el No Spaghetti Edition, se realizaría en Buenos Aires. (En 2004, la sede del evento fue la ciudad española de Barcelona).
El título suena pomposo. Pero, ¿Qué es realmente la música improvisada? "El arte de la improvisación maneja diferentes lenguajes. En nuestro caso, no tomamos un marco de referencia. Es decir, no trabajamos sobre ninguna armonía, ni sobre base rítmica alguna. La improvisación, en general, está ligada al jazz. Pero muchísimas músicas, como la hindú o el flamenco, tienen una gran cuota de improvisación. Incluso, la música clásica", afirma Diego Chamy. Y agrega: "Bach, por ejemplo, era un gran improvisador. Probablemente, era mejor improvisador que compositor. De hecho, muchas de sus obras él las improvisaba y sus alumnos las transcribían".
Chamy es, junto a Kaplan, uno de los responsables de este pequeño fenómeno de las expresiones musicales de vanguardia: "La música pide una expansión, y eso se va dando naturalmente. No tiene sentido quedarte tocando solo, en tu casa, o para los tres tipos en un boliche. Esta movida, en realidad, está ligada a a la producción de los músicos de Buenos Aires. Eso te fuerza a trabajar para que se produzcan este tipo de eventos. Agudizás la curiosidad y fomentás los contactos con músicos de otras partes del mundo".
No Spaghetti Edition fue fundado por los noruegos Tonny Kluften, Ivar Grydeland e Ingar Zach en 1988. La idea es integrar excelentes músicos en el campo de la improvisación para explorar diferentes propuestas estéticas y musicales, y crear nueva música de manera colectiva. Chami aclara que en estas expresiones no hay "ni ritmo, ni melodía, ni armonía ni drama. Es experimentar con el aire, construyendo una pieza sonora en tiempo real".
"Los que más disfrutan de estos encuentros son aquellos que no esperan escuchar lo que ya conocen", advierte Chami. Por eso, conviene despojarse de prejuicios, e ir sin demasiadas expectativas. "¿Viste que la gente que va a un recital se alegra cuando cantan las canciones que ya conocen? Bueno, acá es la revés", sostiene el percusionista. La consigna es, entonces, alegrarse por lo desconocido. Y tener las puertas de la percepción abiertas de par en par.
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